A diferencia de la campaña anterior (17-18), desde octubre a la fecha se produjeron muchas lluvias. Con temperaturas muy altas en los últimos días, aunque con días frescos en los primeros estadios de soja, razón por la cual muchos se preocupaban y expresaban que “la soja crece poco”.

La actual campaña, a diferencia de la anterior (17-18), desde octubre a la fecha, la estamos atravesando con muchas lluvias. Con temperaturas muy altas en los últimos días, aunque con días frescos en los primeros estadios de soja, razón por la cual muchos se preocupaban y expresaban que “la soja crece poco”.

De las condiciones climáticas necesarias para lograr altos rendimientos, la radiación fue la más deficiente en diciembre y enero, debido a la presencia de muchos días nublados y con lluvias. De todos modos, aunque puede restar algunos quintales, es el factor de menor incidencia en el resultado final.

En el momento actual, y teniendo en cuenta principalmente la disponibilidad de agua, todo indica que tendremos altos rendimientos de los diferentes cultivos de verano. En los maíces sembrados en setiembre, las condiciones en su momento crítico fueron excelentes, y también acompañaron durante el llenado. Sólo queda llegar a cosecha.

El estado del cultivo de soja también es excelente, fundamentalmente la soja de primera. Pero en este caso, a diferencia de los maíces sembrados temprano, hay mucho camino por recorrer, lo que exige estar muy atentos al ataque de plagas y enfermedades de fin de ciclo. Muchos productores han sembrado soja de primera en fechas tempranas (octubre) y las condiciones fueron óptimas. La siembra temprana es una muy buena alternativa en años como el actual y en buenos ambientes, ya que le puede sumar varios quintales de ventaja a una siembra de noviembre, con el agregado de que se cosecha más temprano. Si bien no es una situación generalizada, en algunos lotes se complicó la siembra de soja y maíz de segunda por causa de los excedentes hídricos (charqueado, ascenso de napas). En ensayos realizados en Casilda se sembraron maíces en la segunda quincena de enero y se lograron muy buenos rendimientos. Todo depende de cómo continúen las condiciones, en especial de cuándo se producirán las primeras heladas.

En cuanto al trigo, sufrió una fuerte helada en octubre. En los años que corren, con un clima tan variable, las fechas probables de las primeras y últimas heladas pueden apartarse de los promedios históricos. En cuanto a los precios, está por verse lo que suceda tranqueras afuera (conflicto entre Estados Undios y China, producción de Brasil, precio del dólar, etc.), en el momento de la cosecha. Este aspecto no es menor.

Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) Casilda.

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