El 85 % de los lotes de producción agrícola en el sur de la provincia se encuentra bajo régimen de contrato accidental de muy corto plazo y en gran parte de ellos se practica un modelo productivo de escasa rotación con gramíneas y alta proporción de soja en la secuencia. Esto trajo como consecuencia inmediata la pérdida de fertilidad física, química y biológica del suelo.

En el sur de Santa Fe, el 85 % de los lotes de producción agrícola se encuentra bajo régimen de contrato accidental de muy corto plazo y en gran parte de ellos se practica un modelo productivo de escasa rotación con gramíneas y alta proporción de soja en la secuencia. Esto trajo como consecuencia inmediata la pérdida de fertilidad física, química y biológica del suelo, resultado del balance negativo de carbono y nutrientes, y por el aumento de los riesgos de erosión, encostramiento superficial y compactación de los suelos. Simultáneamente, se realiza un subaprovechamiento de la oferta de agua de lluvia, especialmente durante el otoño y la primavera cuando el cultivo de soja cesó su crecimiento y cuando aún no tiene grandes requerimientos, respectivamente. En valores netos, de acuerdo al registro histórico de la zona, anualmente se contabilizan 300 mm de lluvia que el modelo productivo más común pierde de aprovechar, ya sea por evaporación directa del suelo, escurrimiento superficial en zonas con pendiente o bien, por drenaje profundo, recargando la napa y provocando el ascenso del nivel de la misma. Además, el cultivo de soja puede registrar déficits hídricos temporarios debido a la demanda ambiental durante el verano, no compensada por la oferta, y a que el grado de deterioro del suelo genera problemas en la infiltración y almacenamiento del agua de lluvia.

Los sistemas de extensión deben reforzar esfuerzos para promover modelos productivos más sustentables que aumenten la intensidad de uso y cobertura del suelo sin desconocer la inercia a continuar el modelo simplista e insumo-dependiente predominante. Es necesario desarrollar y promocionar alternativas productivas que mejoren el balance de carbono y nutrientes y aumenten la cobertura productiva del suelo, de manera de mejorar la producción de granos por cada milímetro de lluvia y el aprovechamiento económico de la misma y del resto de los recursos productivos.

Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) Casilda

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