El español Pedro de Mendoza estableció un asentamiento al que le dio el nombre de Puerto de Nuestra Señora del Buen Ayre (según la ortografía de la época) en una región habitada por pueblos aborígenes conocidos como querandíes.

El español Pedro de Mendoza estableció un asentamiento al que le dio el nombre de Puerto de Nuestra Señora del Buen Ayre (según la ortografía de la época) en una región habitada por pueblos aborígenes conocidos como querandíes. Como muchas otras poblaciones de América, esta población sirvió en su primera etapa como fortaleza para los españoles que habían llegado a la zona y no como un centro administrativo desde el cual gobernar un territorio dominado.

5 años de continuos ataques por parte de la resistencia indígena que habitaba los alrededores provocaron que la primera Buenos Aires fuese abandonada. En cercanías de las ruinas de esta población, Juan de Garay fundó el 11 de junio de 1580 la Ciudad de La Santísima Trinidad y Puerto de Santa María del Buen Ayre, siendo ésta la segunda y definitiva fecha de establecimiento de la actual capital argentina.