“En 11 meses, los medicamentos que las personas mayores utilizan habitualmente han registrado una inflación acumulada de 202%”, indica un informe.
Desde la llegada de Javier Milei al gobierno, los medicamentos más usados por adultos mayores tuvieron un aumento acumulado del 202% según el informe del Centro de Economía Política (CEPA) realizado en conjunto con el Centro de Estudios Políticos para Personas Mayores (CEPPEMA) y la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria (ALGEC).
“En 11 meses, los medicamentos que las personas mayores utilizan habitualmente han registrado una inflación acumulada de 202,0%”, indica el informe.
En otro de los puntos, el estudio desarrolla la reducción de 44 medicamentos en el PAMI que tenían cobertura del 100% en su vademecum.
“La reducción de moléculas farmacológicas implica que ahora se ofrece un tercio menos de medicamentos en comparación con los que se distribuían de manera gratuita antes de la gestión de Javier Milei”, se advierte en el estudio.
En ese sentido, advierte que la reducción de cobertura por parte del PAMI y el fuerte aumento de los precios afecta directamente a los jubilados, ya que impacta directamente en el costo de vida “al obligarlos a enfrentar un mayor gasto en la compra de medicamentos”.
“Hasta julio, el programa integral de medicamentos gratuitos y con descuento ha permitido un ahorro promedio de $63.800. De cada 10 afiliados/as, 4 reciben todos sus medicamentos de manera gratuita, 5 de cada 10 obtienen al menos dos medicamentos sin costo y 9 de cada 10 reciben al menos uno”, agrega el informe.
“Sin dudas, esta pérdida del ingreso indirecto que representaba el otorgamiento de una mayor cantidad de medicación sin costo y la no actualización de los bonos que compensan la fórmula de movilidad jubilatoria, implican un grave retroceso en materia de derechos y calidad de vida de las personas mayores”, concluye el estudio.
La situación es agravada aún más por la inflación y el rechazo de la nueva ley de movilidad jubilatoria, que, a pesar de ser aprobada por el Congreso, fue vetada más tarde por Milei.
Y así, muchos adultos mayores optan todos los días entre comer o comprar la medicación.