El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) Casilda explica las diferencias entre estos dos tipos, de los cuales comúnmente se escucha hablar como si fueran sinónimos de alimentos saludables o sin agroquímicios. A ambos términos los separa una serie de requisitos fundamentales.

Comúnmente se escucha hablar de productos orgánicos o agroecológicos de manera semejante, como si fueran sinónimos de alimentos saludables o alimentos sin agroquímicos. Sin embargo, a ambos términos los separa una serie de requisitos fundamentales para ser considerados orgánicos o agroecológicos.

La producción orgánica de alimentos es aquella producción en la cual no se utilizan ciertas sustancias que están prohibidas por un protocolo, establecido por una legislación.

Es decir, se produce de acuerdo a un determinado reglamento y es por ello que los alimentos orgánicos tienen certificación. Dicha certificación hace hincapié en la seguridad del consumidor y del ambiente. Lo cual no significa que el alimento esté libre de productos comerciales como hormonas, promotores de floración y extractos vegetales, sino que se utilizan productos comerciales aprobados que no están prohibidos por la reglamentación vigente, porque no causan daño ambiental ni son riesgosos para la salud del consumidor.

Por el contrario, en la producción agroecológica se busca imitar los procesos de la naturaleza; se encuentra íntimamente ligada a la soberanía alimentaria y se destaca por ser local, por ello no puede escribirse un reglamento universal para el cultivo agroecológico. Pero sí, hay principios a seguir que hacen hincapié: en la utilización de recursos renovables; en asegurar condiciones del suelo favorables para el crecimiento de las plantas sanas a través del agregado de abono orgánico; en conservar el recurso agua a través de la cosecha de agua de lluvia; en hacer manejo de enfermedades y malezas, y no en controlarlas, empleando la asociación de especies vegetales y preparados naturales en lugar de agroquímicos; en aumentar y proteger la fauna benéfica y, sobre todo, en la diversificación de cultivos y en la combinación de distintas especies vegetales (Biodiversidad).

En resumen, la producción orgánica tiene como fin conservar el ambiente y cuidar la salud del consumidor; en cambio la producción agroecológica es mucho más que eso, es una mirada más integral sobre el ecosistema, plantea modos de producción y consumo que respeten la diversidad natural y sociocultural de los ecosistemas locales y aseguren la sustentabilidad.

Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) Casilda.

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