Autoproducción de semillas: Hortalizas de fruto y bulbo
En la agricultura familiar, las semillas se convierten en un tesoro, y producirlas es una tarea muy importante, pero no por ello complicada. La naturaleza nos da la posibilidad de continuar produciéndolas a partir de las plantas que tenemos en nuestra huerta.
¿Cómo producimos nuestras semillas?
En primer lugar elegimos las plantas más sanas y de buen porte, nos alcanza con una o dos, las regamos y abonamos para que no sufran. De esta manera tendrán más flores y frutos de buen tamaño.
La cosecha de las semillas depende del tipo de hortaliza de la que se trate. Para las hortalizas de fruta hacemos lo siguiente:
Choclo: Dejamos sin cosechar un par de lindas mazorcas hasta que estén completamente secas y duras. Luego las arrancamos, cortamos los extremos, desgranamos la parte media y conservamos en un lugar sin ratones, ya que para ellos las semillas son muy apetecibles.
Rabanito, zanahoria y remolacha: Las dejamos en la huerta hasta que emitan la vara floral donde se alojan las semillas y luego las cortamos. Las raíces tendrán un tamaño exagerado, una consistencia dura; serán muy fibrosas y de gusto feo. Por último, las dejemos orear en un lugar con sombra y las guardamos.
Batata: Se las deja enterradas hasta el invierno, momento en que sus hojas y tallos se secan, las desenterramos y guardamos en cajones con paja y tierra hasta cubrirlas completamente. En la primavera siguiente las sacamos del cajón y las plantamos en la huerta. Los brotes de las batatas se los pueden cortar y trasplantar.
Para las plantas con bulbos:
Cebolla: Las dejamos en la huerta hasta que emitan un ramillete floral en su parte central, las cortamos y colocamos en un lugar aireado y a la sombra para que se sequen. Luego, separamos las semillas negritas de los restos florales y guardamos en un lugar seco.
Ajo: Debemos elegir las mejores cabezas. Separamos de ellas los dientes más grandes para conservarlos en una bolsita de red hasta el otoño siguiente.
Todas las semillas ya envasadas en frascos y bolsitas de papel, es conveniente guardarlas en un armario o cajón dentro de la casa.
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